Progreso de Leccion
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ANTES DE COMENZAR

Idea principal: El hambre espiritual solo puede ser satisfecha por el amor del Padre celestial.

Objetivos:

  • Comprender la imposibilidad de saciar el hambre espiritual por medios humanos.
  • Ser conscientes de que una carencia personal puede transformarse en el dios que gobierna aun la vida del creyente.
  • Actuar cada día según el «espíritu de adopción» que nos lleva al Padre, en la confianza de que el acceso a él fue ganado para nosotros en Cristo.

APERTURA

Busca el título de un artículo, de un eslogan, de una fotografía o de cualquier propaganda que impacte directamente sobre alguna necesidad o deseo personal.

Para el desarrollo de esta consigna, tú puedes proveer revistas a los participantes, o cada uno puede acceder a la búsqueda mediante internet.

¿Qué representa ese título, ese anuncio o esa imagen para ti?

¿De qué manera ha impactado sobre tu estado de ánimo, sobre tus sueños, sobre tus proyectos? ¿Consideras que el estímulo que has recibido visualmente podría satisfacer alguna carencia física, emocional o intelectual? ¿Por qué?

«Cuando el vacío que tenemos es nuestro dios, vivimos gobernados por la carencia; por ende, siempre estaremos insatisfechos. Solo una relación con Dios como Padre puede resolver nuestra hambre más profunda».

VIDEO

Reproduce el video del capítulo 2: La barrera está levantada (10 minutos).

REPASO Y ESTUDIO

Al principio del video, Carlos dice que «todos los seres humanos tenemos hambre de sentirnos plenos, amados, seguros y aprobados».

Lee Eclesiastés 1.3-8. ¿Qué manifiestan estos versículos sobre nuestra incapacidad de encontrar significado o satisfacción en las cosas creadas? (El sentido temporal y provisorio de la humanidad: los fenómenos naturales cumplen un ciclo sencillo y recurrente y las generaciones se suceden unas tras otras. Nuestras palabras no pueden explicar adecuadamente el mundo ni afectarlo).

¿Por qué tus oídos siempre quieren oír más? Por más maravilloso que sea lo que ven tus ojos, ¿por qué nada logra satisfacerte por completo?

Lee Eclesiastés 3.11. En este texto, el Predicador revela la clave para entender por qué las cosas temporales no pueden darnos satisfacción definitiva. ¿Cuál es? (Dios puso eternidad en nuestro corazón).

Aunque cada persona es mortal debajo del sol, vivirá en algún lugar para siempre. En función de esto, ¿cuál debería ser la esencia de la cosmovisión cristiana? (Vivir el presente con la vista en la eternidad). 

¿Alguna vez has intentado saciar tu necesidad espiritual fuera de Dios? ¿Cuáles fueron los resultados?

Conversen sobre los intentos inútiles de satisfacer el hambre espiritual, poniendo nuestra confianza en la pareja o en la religión. Observen, en el primer caso, la pretensión de que un ser humano sea Dios; en el segundo, la creencia de que por medio de una vida religiosa podemos «controlar a Dios» para que él obre a nuestro favor. Involúcrate en el diálogo a través de tus propias vivencias.

A pesar de nuestra insignificancia en comparación con la creación, ¿qué hace Dios por nosotros de acuerdo con el Salmo 8.3-4? (Piensa en simples mortales y se ocupa de ellos, ¡cuánto más hará por sus hijos adoptados en Cristo!).

Carlos explica que muchos creyentes siguen con hambre espiritual porque no han experimentado la paternidad de Dios. El amor que produce confianza también destierra temores.

Lee 1 Juan 4.17-18. ¿A qué temor se refiere el apóstol en el versículo 17? (Al castigo eterno). ¿De qué manera el perfecto amor echa fuera el temor? (Confiando en Dios: este es un indicativo del amor maduro).

A medida que te vas afirmando sobre el amor del Padre, ¿cómo enfrentas tus temores cuando fijas tus ojos en Cristo?

Por cristiano que seas, si no experimentas una relación profunda con Dios, él no es tu Señor. Carlos afirma que «la carencia se convertirá en tu dios. ¡Sí, en tu dios!». Aunque no sean malos en sí mismos, ¿qué placeres o deseo por otras cosas pueden convertirse en un mortífero sustituto de Dios? (Por ejemplo, la buena comida, el café, la jardinería, la lectura, la decoración, los viajes, las inversiones, ver la tele, navegar por internet, ir de compras, hacer deporte, etc.). ¿Qué apetito dirige el curso de tu vida?

En el video, Carlos relata una escena de la vida cotidiana. ¿Con qué comparó la barrera del ferrocarril? (Con nuestros pecados). ¿Quién logró «levantar la barrera» que te separa de Dios? (Cristo).

¿Qué dicen estos pasajes sobre la obra de Cristo a tu favor?

Primera Corintios 15.3 (Cristo murió por mis pecados).

Filipenses 3.9 (Por la fe en Cristo, no por mi propia justicia, Dios me declara justo).

Romanos 8.34 (Jesús intercede ante el Padre por mí).

Romanos 8.1 (Por Cristo, Dios me ha hecho libre de toda condenación).

Romanos 6.23 (Por medio de Cristo, Dios me regala la vida eterna).

Lee Romanos 8.38-39. ¿Qué experiencias y personas no pueden separar al creyente del amor de Dios en Cristo? ¿Crees que todavía tienes razones para dudar de su amor incondicional? ¿Cómo has experimentado esta promesa en tu vida?

Lee Hebreos 10.22. ¿Qué implica acercarnos a Dios «con corazón sincero y «en plena certidumbre de fe»? (Con un corazón purificado por la obra de Cristo; con plena confianza en Dios, es decir, con un corazón creyente que está sometido a él).

¿Entras directamente a la presencia de Dios cada día de esta manera? Si tu respuesta es sí, ¿cómo podrías alentar a otros creyentes a hacer lo mismo? Si tu respuesta es no, ¿qué pasos deberías dar para disfrutar esta íntima comunión con Dios?

Carlos concluye la sesión, diciendo: «El acceso está abierto, la barrera fue levantada. No te quedes como si la barrera aún existiera».

APLICACIÓN

  • — Considera cuál es la verdadera motivación que dirige tu vida. ¿Buscas solo el bienestar de tu alma? Recuerda que «cuando Dios sea el deseo supremo de tu corazón, él será supremo en todas las cosas» (John Piper). Medita en el texto de Salmos 73.25-26. Reclámalo para tu vida esta semana.
  • — Agradece a Dios por su amor infinito e incondicional por ti cada mañana. Lee Isaías 61.10. Regocíjate en su amor. ¿Qué harías por amor a él? Observa lo que estuvo dispuesto a hacer el apóstol Pablo, según Filipenses 3.8. Reconoce qué cosas deberías perder «a fin de ganar a Cristo». Decide que las abandonarás mediante la obra del Espíritu en ti.
  • — Identifica cuál es tu temor: una enfermedad, una pérdida, alguna dificultad, algún desafío, no dar con la medida de lo esperado, no ser amado, etc. Escríbelo. Esta semana, busca pasajes bíblicos que te afirmen sobre los atributos y la inmutabilidad de Dios. Apúntalos a continuación del temor que has descrito. Proclama en alta voz estas verdades espirituales. Pide al Señor que te ayude a experimentar plenamente el perfecto amor de Dios.

UN PASO MÁS

Si tienes conciencia de paternidad, la vives cada día y te relacionas con Dios, dejarás de ser carencia y llegarás a ser respuesta para los demás. Esta semana, sé la voz, las manos o los pies que reflejen el amor de Dios a alguna persona.

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