Lección 2, Tema 2
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2.2 Notas del Mensaje

Progreso de Lección
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Hace unos meses se estrenó en Netflix una película llamada: “No Mires Arriba” (mostrar imagen)

  • Dos astrónomos (Leonardo DiCaprio y Jennifer Lawrence) descubren que, en pocos meses, un meteorito destruirá el planeta Tierra.
  • A partir de ese momento, intentan advertir a la humanidad del peligro que se avecina a través de los medios de comunicación.
  • Muchas veces las personas prefieren “no mirar hacia arriba” y seguir enfocados en las cosas de aquí abajo.

Aunque a veces, si “miramos por aquí abajo “, nos encontramos con situaciones más amenazantes y desafiantes que la posible caída de un meteorito.  

  • Cambio de ministro de Economía.
  • Esta no ha sido una semana sencilla para el dólar, la inflación y las importaciones.
  • Tampoco para el resto de nosotros que, aunque no alcancemos a entender todo lo que está pasando, nos damos cuenta de que las cosas están “complicadas”.

En medio de la tensión entre una realidad que por momentos supera la ficción, y una ficción que cada vez parece más real, quiero hablarte en este día, no sobre: NO MIRES ARRIBA, sino todo lo contrario:

MIRÁ HACIA ARRIBA | BASADA EN HECHOS REALES

¿Qué debemos hacer los cristianos cuando las cosas se “complican”?

Para empezar a responder esta pregunta, te propongo otra pregunta:

  • ¿Qué hacían los primeros cristianos cuando las cosas se ponían “complicadas”?

1. Orar en todo tiempo

1 Así que recomiendo, ante todo, que se hagan plegarias, oraciones, súplicas y acciones de gracias por todos, 2 especialmente por los gobernantes y por todas las autoridades, para que tengamos paz y tranquilidad, y llevemos una vida piadosa y digna. 3 Esto es bueno y agradable a Dios nuestro Salvador, 4 pues Él quiere que todos sean salvos y lleguen a conocer la verdad. 1 Timoteo 2:1–4 (NVI)
  • “Ante todo”: La oración no debe ser nuestro último recurso, sino nuestra prioridad.
  • ¿Estás orando por Argentina? ¿Estás orando por los gobernantes de Argentina?
  • Quizás pienses… bueno, es fácil para el apóstol Pablo decir: “oren por sus gobernantes, porque él no vivió en este tiempo. Con la Pandemia, la guerra de Ucrania, la inflación… Si él estuviera aquí, ¿qué diría?”
  • ¿Cómo puede ser que en este contexto de persecución, cárceles y muerte, el apóstol recomendara que oremos por las autoridades para que tengamos paz y tranquilidad?

Cuando las cosas se complican, los hijos de Dios tenemos un recurso maravilloso: La Oración.

  • Si Dios ya sabe lo que necesitamos, ¿por qué espera que se lo pidamos en oración?
  • ¿Estás orando por tus necesidades? ¿Le estás pidiendo a Dios que intervenga en tus circunstancias?
  • No sólo podemos orar por los que están en autoridad, y por los problemas de Argentina. También podemos ser parte de la solución.
    • Si Dios te ha llamado a la política, o como servidor público en el área de la educación, salud, cultura, etc. = sé fiel a ese llamado de Dios.
    • Si Dios te ha llamado a ser parte de la solución, no te rindas. El Dios que te llamó, Él te va a respaldar y usar para su gloria.
  • Pero para el resto de nosotros: sigamos orando por nuestro país y sus autoridades.

2. Mantener los pies firmes en la tierra  

2 Pues ustedes saben muy bien que el día del regreso del Señor llegará inesperadamente, como un ladrón en la noche. 3 Cuando la gente esté diciendo: «Todo es paz y seguridad», entonces le caerá encima la catástrofe tan repentinamente como le vienen los dolores de parto a una mujer embarazada; y no habrá escapatoria posible. 4 Pero ustedes, amados hermanos, no están a oscuras acerca de estos temas, y no serán sorprendidos cuando el día del Señor venga como un ladrón. 5 Pues todos ustedes son hijos de la luz y del día; no pertenecemos a la oscuridad y a la noche. 6 Así que manténganse en guardia, no dormidos como los demás. Estén alerta y lúcidos. 7 Es en la noche cuando la gente duerme y los bebedores se emborrachan; 8 pero los que vivimos en la luz estemos lúcidos, protegidos por la coraza de la fe y el amor, y usemos por casco, la esperanza de nuestra salvación. 1 Tesalonicenses 5:2–8 (NTV)
  • Pablo los anima a pensar en el Regreso de Jesucristo.
    • La Venida del Señor para los que rechazaron el Evangelio será algo terrible (inicio de la Tribulación).
    • Pero para nosotros, los que hemos puesto nuestra fe en Jesús, será un día glorioso.
  • Las personas que no tienen la luz de Jesucristo, andan en oscuridad.
    • No pueden ver (o no quieren ver) lo que está pasando.
    • No quieren “mirar hacia arriba”
    • Por eso ellos buscan “paz y seguridad” en las cosas de aquí abajo… y no saben lo que les espera.
  • Pero nosotros, los que hemos creído en Jesucristo, somos hijos de la luz y del día.
    • Por eso no seremos sorprendidos cuando el Señor regrese.
  • Lo que sí dice, es que… Hasta que el Señor Jesús regrese debemos estar alertas y lúcidos:  
    • Alertas: Mantenernos con los pies en la tierra, de pie, firmes como un soldado. Aunque los demás estén postrados en el sueño de la indiferencia o la resignación.
    • Lúcidos: Mantenernos despiertos, sobrios. Aunque los demás estén dormidos, o adormecidos por tantas cosas (alcohol, drogas, entretenimiento, confort)
  • También debemos mantenernos protegidos
    • Estamos en medio de una batalla espiritual, que se libra en las mentes y corazones de las personas.
    • Nuestra arma más poderosa (además de la Oración) es la Palabra de Dios.
    • La Verdad nos hace libres. La Verdad echa fuera toda mentira y oscuridad.
  • Por eso necesitamos estar protegidos:
    • Aquí Pablo nos da una versión resumida de la armadura del cristiano (Efesios 6).
    • Si no vas a tener toda la armadura puesta, al menos no te olvides de:
      • Coraza = protege el pecho (corazón)
      • Casco (yelmo) = protege la cabeza.

Cuando las cosas se “complican”, y la realidad que vivimos quiera venir a dañar nuestra mente y corazón, debemos protegernos con estos elementos:

  1. Coraza de la fe y el amor.
    • La fe es la “certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve”. (Heb 11:1)
    • La fe es sinónimo de confianza en las Promesas de Dios.
      • Ninguna Promesa de Dios se cumple en el momento en que fue dada.
      • Si se cumpliera instantáneamente = sería un Milagro.
      • Toda Promesa de Dios es un Milagro con un reloj que tiene una cuenta regresiva.
    • Protegé tu corazón con la coraza de la fe y el amor, pero también usala para proteger lo más valioso que Dios te ha dado = Tu familia.
      • Cuando las mentiras e ideologías de este mundo vengan a atacar tu matrimonio, o la identidad de tus hijos = protegelos con la coraza de la fe y el amor.
  2. Casco de la esperanza de la salvación.
    • La coraza protege el corazón, las emociones, los sentimientos.
    • El casco protege la cabeza, la mente, los pensamientos.
      • Orá, mantené tus pies firmes (no retrocedas).
      • Pero también protegé tu mente con el casco de la esperanza de la salvación.

4. Mirar hacia Arriba

1 Alzaré mis ojos a los montes; ¿De dónde vendrá mi socorro? 2 Mi socorro viene del Señor, que hizo los cielos y la tierra. Salmo 121:1–2 
Puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe. Hebreos 12:2  

Cuando las cosas se “complican”, el apóstol Pablo nos anima a orar, a mantener los pies firmes en la tierra, pero también nos invita a mirar hacia arriba, y enfocarnos en Jesús.

5 Que haya en ustedes el mismo sentir que hubo en Cristo Jesús, 6 quien, siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse, 7 sino que se despojó a sí mismo y tomó forma de siervo, y se hizo semejante a los hombres; 8 y estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo y se hizo obediente hasta la muerte, y muerte de cruz. 9 Por lo cual Dios también lo exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre, 10 para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra; 11 y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios el Padre. Filipenses 2:5–11 (RVC)
  • Aquí la Palabra nos anima a tener el mismo sentir que tuvo Jesucristo.
    • Teniendo todo, no se aferró a nada.
    • Jesús se despojó a sí mismo, tomó forma de siervo (esclavo), y se hizo como uno de nosotros. Se humilló a sí mismo, y se hizo obediente hasta la muerte.
    • Porque no estaba preocupado por las cosas que podía perder, sino ocupado en todo lo que había venido a ganar.

Si hoy miras hacia arriba para ver la grandeza de Jesús, cuando vuelvas a mirar hacia abajo, vas a descubrir la pequeñez de tus problemas.

Conclusión

Cuando las cosas se pongan complicadas:

  1. Orando en todo tiempo  
    1. Con los pies firmes sobre la tierra  
    1. Mirá hacia Arriba  

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